Niño de seis años muere tras correr hasta el agotamiento; su padre lo obligó porque estaba ‘muy gordo’

Trágica muerte de niño de 6 años por exigencias excesivas del padre

Trágica muerte de un niño en Nueva Jersey: Padre enfrenta cargos por homicidio

 

El caso de Christopher Gregor, de 31 años, ha conmocionado al estado de Nueva Jersey, pues enfrenta cargos de homicidio por la muerte de su hijo de seis años, Corey Micciolo. El pequeño falleció a causa de contusiones cardíacas luego de ser sometido a un esfuerzo extremo en una caminadora por su propio padre, quien lo obligó a correr hasta el agotamiento a una velocidad considerablemente alta debido a que consideraba que estaba "demasiado gordo".

 

Las autoridades de Nueva Jersey han catalogado el comportamiento de Gregor como "abuso crónico", especialmente después de que la autopsia revelara graves lesiones internas en el niño, incluyendo contusiones cardíacas y hepáticas con inflamación aguda.

 

En la corte estatal se presentó un video perturbador que muestra a Gregor subiendo a su hijo a la caminadora, donde el pequeño corre a una velocidad inapropiada para su edad. En el video, se puede observar cómo Corey cae en un momento dado debido a la rapidez de la máquina, pero su padre lo vuelve a subir, incluso después de aparentemente agredirlo.

 

Las consecuencias de este maltrato se hicieron evidentes semanas después, cuando Corey presentó síntomas alarmantes como tropezar, arrastrar palabras, náuseas y dificultad para respirar. Trágicamente, el 2 de abril falleció en medio de convulsiones, y los médicos determinaron que las lesiones en su pecho, abdomen y órganos internos estaban directamente relacionadas con el esfuerzo excesivo al que fue sometido por su padre.

 

Es importante mencionar que Gregor no estuvo presente en la vida de Corey hasta que este tuvo cuatro años, y compartía la custodia del niño con su madre en el momento de su muerte.

 

Actualmente, Gregor se encuentra detenido sin derecho a fianza en la cárcel del condado de Ocean, habiendo rechazado una oferta de declaración de culpabilidad que implicaba 30 años de prisión. Si es hallado culpable, podría enfrentar cadena perpetua, marcando este caso como uno de los más trágicos y desgarradores en la historia reciente de Nueva Jersey.