Una joven madre dejó a su hijo con una desconocida en Nuevo León; el menor vivía bajo un puente y tenía signos de presunto abuso físico.
Nuevo León, México. Un nuevo caso de abandono infantil ha causado conmoción en el estado de Nuevo León, luego de que una mujer de 23 años dejara a su hijo de apenas 2 años en la casa de una desconocida. El menor, según reportes preliminares, presentaba signos de maltrato físico y vivía con su madre en condiciones extremas bajo un puente vehicular.
Los hechos ocurrieron cuando María del Roble, vecina del sector, fue sorprendida por la presencia de la joven madre, quien sin mayor explicación le dijo que le "regalaba" al niño, confesando entre lágrimas que había cometido un crimen. Ante la desconcertante situación, María decidió resguardar al menor y alertar a las autoridades locales.
El pequeño mostraba marcas visibles en el cuerpo, aparentemente de golpes, lo que llevó a las autoridades a activar los protocolos de protección infantil de manera inmediata. Elementos del DIF Nuevo León y la policía estatal acudieron al lugar para asegurar al menor y trasladarlo a una unidad médica, donde fue evaluado por pediatras y personal especializado.
La madre, cuya identidad aún no ha sido revelada, fue detenida horas después por elementos de la policía local. En su declaración inicial, aceptó que ella y su hijo vivían en situación de calle desde hace meses y que no contaba con recursos para alimentarlo ni garantizar su seguridad. Afirmó también que se sentía culpable por el daño causado y que por eso decidió entregarlo a otra persona.
La Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes ya inició una investigación para esclarecer el caso y determinar si existen antecedentes de violencia intrafamiliar o si hay más personas involucradas. El menor permanece bajo observación médica y psicológica en un centro de asistencia social.
Organizaciones civiles y defensoras de los derechos de la infancia han alzado la voz para exigir mayor vigilancia y apoyo a madres en condiciones de vulnerabilidad, subrayando la importancia de reforzar las redes de protección social.
Este caso pone nuevamente en la agenda pública la urgencia de atender a las familias en situación de calle, así como de mejorar la detección temprana de posibles abusos infantiles.