Eylin fue rescatada con vida tras ser golpeada y retenida en un motel. El agresor fue detenido por el OIJ la madrugada de este viernes.
.jpg "Operativo del OIJ rescata a Eylin Marín de motel tras brutal agresión en bar de Desamparados")
San José, Costa Rica. La madrugada de este viernes 19 de abril, el país despertó con una noticia esperanzadora tras horas de angustia. Eylin Marín Martínez, la joven brutalmente agredida en un bar de San Rafael de Desamparados, fue localizada con vida en una habitación de motel, donde presuntamente permanecía privada de libertad por el mismo hombre que la golpeó.
La noticia fue confirmada por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que tras la difusión de impactantes videos en redes sociales —en los que se ve a Eylin siendo golpeada, asfixiada y sacada a la fuerza del bar— activó una investigación de oficio.
El rastreo se intensificó al recibir información clave sobre la ubicación del agresor. Esto permitió que las autoridades ejecutaran un operativo conjunto entre la Fuerza Pública, el equipo táctico del Ministerio de Seguridad y agentes del OIJ, quienes irrumpieron en un motel del sector sur de San José.
Durante el allanamiento, los ocupantes de la habitación no opusieron resistencia. Eylin fue hallada con múltiples signos de violencia, pero según el parte preliminar, se encuentra en condición estable. El sujeto fue detenido en el lugar y ya está bajo custodia del Ministerio Público.
Ahora se espera la declaración oficial de la joven, la cual será fundamental para robustecer el expediente judicial que ya se tramita por privación de libertad, agresión agravada y posiblemente otros delitos conexos.
Un país consternado pero aliviado
El caso ha estremecido a la opinión pública costarricense, tanto por la brutalidad del ataque como por la indiferencia de los testigos presenciales en el bar. La inacción de quienes estaban en el lugar ha sido objeto de duras críticas en redes sociales y foros públicos.
Eylin no solo sobrevivió a una agresión salvaje, sino a una amenaza aún mayor. Su rescate representa un llamado urgente para tomar conciencia sobre la violencia de género, fortalecer la prevención y no permitir la indiferencia social ante estos crímenes.