Ronny Vallejos, de 14 años, fue hallado sin vida tras desaparecer en Puntarenas. El crimen conmocionó a Costa Rica.
Ronny Vallejos, de 14 años, fue hallado sin vida tras desaparecer en Puntarenas. El crimen ha causado conmoción nacional.
Puntarenas, Costa Rica — La desaparición de Ronny Genaro Vallejos Radni, un adolescente de 14 años que había sido reportado como desaparecido desde marzo de 2024, terminó con un desenlace devastador. Las autoridades confirmaron el hallazgo de su cuerpo en condiciones alarmantes, generando un profundo impacto en la comunidad local y en todo el país.
El menor fue visto por última vez el 15 de marzo en Chacarita, donde residía junto a su familia. Su caso movilizó a vecinos, familiares y fuerzas policiales durante semanas. No obstante, la esperanza de encontrarlo con vida se desvaneció cuando la Fiscalía Adjunta de Puntarenas confirmó que el joven fue víctima de un homicidio con niveles extremos de violencia.
El cuerpo de Ronny fue encontrado descuartizado y parcialmente incinerado. Según la acusación del Ministerio Público, el crimen ocurrió entre las 3:40 p.m. y las 8:00 p.m. del mismo día de su desaparición, dentro de una vivienda en el barrio 20 de Noviembre. Tres personas están siendo procesadas por su posible participación: dos adultos y un menor de edad.
Los sospechosos, identificados por sus apellidos Vega Azofeifa y Matarrita Matarrita, habrían actuado con premeditación, según la reconstrucción de los hechos. El tercer implicado, un adolescente, enfrenta un proceso ante la Fiscalía Penal Juvenil. Aún se desconocen públicamente los motivos del crimen.
La lectura de la sentencia está programada para el lunes 19 de mayo en los Tribunales de Puntarenas. De encontrarse culpables, los adultos podrían enfrentar hasta 35 años de prisión. La comunidad permanece atenta y exige justicia por un caso que ha conmocionado profundamente a Costa Rica.
El asesinato de Ronny Vallejos ha avivado el debate sobre la violencia contra menores y la necesidad urgente de reforzar los sistemas de protección infantil. Su nombre se suma a la alarmante lista de menores que han perdido la vida de manera violenta, dejando un vacío doloroso en su entorno y un llamado urgente a la acción social e institucional.
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