Un informe de la Guardia Civil descarta fallos en la vía y apunta al exceso de velocidad como causa principal.
Zamora, España — Un informe pericial preliminar de la Guardia Civil ha confirmado que el futbolista portugués Diogo Jota conducía el Lamborghini accidentado en la A-52, donde falleció junto a su hermano André Silva. El documento también sostiene que el exceso de velocidad fue la causa más probable del siniestro. ¿Cómo cambia esto la investigación?
La investigación sobre el trágico accidente en el que fallecieron Diogo Jota y su hermano André Silva ha dado un giro clave esta semana. La Guardia Civil española ha concluido, tras las primeras pericias, que el jugador del Liverpool era quien conducía el vehículo en el momento del siniestro.
El accidente tuvo lugar en la autovía A-52, a la altura de la provincia de Zamora, en una zona recta y sin dificultades técnicas para la conducción. Según el informe técnico, el Lamborghini Huracán alquilado en el que viajaban los hermanos circulaba por encima del límite permitido de 120 kilómetros por hora.
Uno de los hallazgos más relevantes es la determinación de la identidad del conductor, un dato que permanecía sin confirmar oficialmente hasta ahora. Las pruebas recogidas por los agentes de la Guardia Civil descartan que André Silva estuviera al volante, y apuntan directamente a Jota, de 28 años.
El informe, que aún no ha sido entregado al juzgado correspondiente, también considera como factor adicional un posible reventón del neumático delantero derecho. Sin embargo, señala que el exceso de velocidad fue decisivo en la pérdida de control del coche.
A diferencia de lo que ocurre en otras zonas de la red vial española, este tramo de la A-52 no es considerado un punto negro. Según los expertos en seguridad vial, se trata de un área recta, bien señalizada y sin antecedentes recientes de accidentes graves.
Los agentes no han encontrado indicios de participación de otros vehículos ni consumo de alcohol o sustancias. El siniestro habría sido producto del exceso de velocidad combinado con la inestabilidad provocada por el neumático dañado.
El vehículo, un Lamborghini Huracán de alta gama, había sido alquilado durante la estancia de ambos hermanos en España. Se desconoce aún si existían seguros adicionales o cláusulas especiales relacionadas con la conducción de ese tipo de vehículos deportivos.
La noticia ha conmocionado al mundo del fútbol, especialmente en Portugal y el Reino Unido. El club Liverpool FC ha emitido mensajes de condolencia y envió una delegación oficial al funeral, celebrado en Gondomar, localidad natal de ambos hermanos, en las afueras de Oporto.
En el sepelio, asistieron figuras del fútbol portugués, miembros del cuerpo técnico del Liverpool y representantes del gobierno local, en un acto cargado de emoción y respeto.
Diogo Jota, internacional portugués y figura destacada del Liverpool, tenía una prometedora carrera por delante. André Silva, su hermano menor, también estaba vinculado al deporte, aunque sin la misma proyección pública.
El informe de la Guardia Civil permitirá a las autoridades judiciales avanzar en el cierre del caso, aportando claridad sobre lo ocurrido y despejando algunas especulaciones surgidas tras el accidente.
La familia ha solicitado privacidad durante el proceso y no ha emitido comentarios sobre el contenido del informe. Sin embargo, se espera que en los próximos días se conozcan más detalles oficiales.
Mientras tanto, el entorno futbolístico lamenta la pérdida de dos jóvenes vidas y reflexiona sobre los riesgos asociados a los vehículos de alto rendimiento y la conducción a alta velocidad.